Esta semana nos sumergimos en la poesía como "arma cargada de futuro", en las palabras de Gabriel Celaya cuando se esmeraba en argumentar que los y las poetas tenemos un deber con nuestro tiempo, una responsabilidad social anclada en la denuncia de los males contemporáneos y la reivindicación de cada una de las luchas que como habitantes del mundo debemos dar. Es en esos caminos en que anda Marianela con su poesía gorda. En esa odisea de escollos para llegar a una sociedad que deje de patologizar nuestros cuerpos gordos, nuestras carnes generosas tan hermosas como las de las corporalidades hegemónicas. Esas que puja por imponer el canon de belleza heteropatriarcal que solo vende cosificación para la exhibición de envases con fecha de vencimiento al primer kilo disidente o el paso del tiempo negado como naturalidad de la vida festejada y experimentada. Estereotipos diseñados y avalados para la comercialización. Para disciplinar en pos de vender toda la parafernalia que invite a emular o acercarse lo más que se pueda a eso que dicen es el cuerpo supuestamente correcto y presuntamente sano. Marianela escribe sobre todo aquello que nos intenta censurar como cuerpos que existen, y se presenta así:
"Soy Marianela Saavedra, feminista interseccional, escritora poeta, madre, profesora, militante del activismo gorde.
Nací en Entre Ríos en el 78, he vivido y viajado en y por varios lugares, estoy hace cuatro años en la Comarca Andina donde trabajo como profe de educación especial, escribo, publico libros y participo en distintos eventos culturales y artísticos.
Escribo poesía desde que aprendí a escribir pero no asumí que era poeta durante décadas. No es fácil para una mujer marrón y pobre asumirse como consumidora y hacedora de arte y quizás por eso siempre me he manejado en ámbitos no academicistas y autogestivos".
"Un cuerpo no es un cuerpo identitario per se, como en todo territorio existen límites individuales y sociales, delimitaciones, definiciones, pronunciaciones y espacios por descubrir y conquistar.
El reconocimiento corporal y la confirmación de una identidad pueden ser procesos largos, con muchos altibajos, nos vamos haciendo, paciencia.
(Mi gordura se conforma por partes, me armo de a poco, "la parte baja de mi panza" me cuesta, mucho me cuesta, hacerla visible es mi política de emancipación y de amor)".
Sigan la campaña de @mujeresquenofuerontapa #hermanasoltalapanza
HermanaSoltáLaPanza
Marianela invita:
"Para quienes preguntan, quieren y apoyan comprando mis libros, les cuento que POESÍA GORDA (y Apodyopsis en algunas), están:
- en CABA los pueden conseguir en las sucursales de Librería Sudestada y autorasentienda
- en La Plata con la gente de @ladiversalibros
- en Roca y alrededores con Sudestada Fiske_Roca
- en Viedma están en @chulapaviedma
- por Villa Allende (Córdoba) los tiene @buhorojolibros
- en Mar del Plata, vayan al @elgranpezlibros
Y si no pueden o ya compraron pero creen que vale seguir apoyando el arte autogestivo recuerden que en mi bio está el enlace para los "cafecitos" que siempre me vienen re bien.
Gracias siempre por dejar que la poesía les haga cosas y por acompañarme a que yo siga haciendo cosas con la poesía".
Maravillémonos con uno de sus poemas:
DESOBEDIENTE, de "Poesía Gorda" (2021).
Este cuerpo
que no me obedece
que no se estira
sin estriarse
que no se cae
sin romperse
que no se rompe
sin perder partes
que se dispara
en direcciones divergentes
dibujando horizontes
a los que no termino
de llegar jamás,
este cuerpo
que no conforma
pero convida
que asume
que no se resiste
a la inercia del deseo
y que no desafía
a las leyes
del tiempo y la gravedad,
este cuerpo
insuficiente pero completo,
está carne
que crece latiendo
que cree amando,
este cuerpo
que no obedece leyes
pero respeta deseos,
éste es mi cuerpo.
Mi cuerpo.
(No te apropies de mi espacio
con tus definiciones ni adulaciones,
antes que gustarte,
prefiero interpelarte).
Sus redes:
- Instagram @marianela_poesiagorda